Presentamos el segundo vino elaborado por maceración carbónica de nuestro blog. Un proceso de elaboración criticado por algunos, ya que afirman que estresa demasiado al vino y que es una forma precipitada de comercialización, pero alabado por otros (entre los que nos incluimos), porque proporciona al vino una intensidad aromática muy potente y agradable y una gran acidez que lo hace muy fresco y apetecible.
No nos vamos a entretener en explicar este proceso, que seguro muchos conocéis, simplemente mostramos el procedimiento mediante este esquema muy ilustrativo:
Herrigoia 2014 es un vino joven monovarietal de tempranillo elaborado por bodegas Compañón Arrieta (http://bodegascompanonarrieta.com) ubicada en la población de Lanciego (Álava/Araba) dentro de la D.O.Ca Rioja y en el dominio de la Rioja Alavesa, que tanto gusta a los que suscriben.
Es un vino que por su juventud presenta un color picota violáceo (típico de la maceración carbónica) con ribete claramente cardenalicio con buena lágrima bastante glicérica.
El espectáculo comienza ya en la nariz, que es donde estos vinos destacan claramente frente a los de elaboraciones tradicionales. Rápidamente aparecen aromas de fruta fresca, moras, frambuesas y sobre todo caramelo de cerezas ácidas (ufff, recuerdos de la infancia de cuando devorábamos los caramelos Kojak), realmente este vino huele a chuches!!
En boca, tiene buena y descarada acidez (sin ser molesta) lo que le hace muy fresco y apetecible, es ligero, con taninos muy domados y suaves para su juventud, predomonio de fruta nuevamente y mucha mucha cereza. ¡Una delicia! Tal vez sea algo corto con persistencia media.
En definitiva nos ha parecido un gran vino, muy redondo, agradable, recomendable y al terminar la cata surgió al unísono: "el día que Barrica Llena tenga una vinoteca, éste sería un serio candidato a vino joven de la casa".
Por todo ello, creemos justo calificar a este maceración carbónica con 80 BLL.
El espectáculo comienza ya en la nariz, que es donde estos vinos destacan claramente frente a los de elaboraciones tradicionales. Rápidamente aparecen aromas de fruta fresca, moras, frambuesas y sobre todo caramelo de cerezas ácidas (ufff, recuerdos de la infancia de cuando devorábamos los caramelos Kojak), realmente este vino huele a chuches!!
En boca, tiene buena y descarada acidez (sin ser molesta) lo que le hace muy fresco y apetecible, es ligero, con taninos muy domados y suaves para su juventud, predomonio de fruta nuevamente y mucha mucha cereza. ¡Una delicia! Tal vez sea algo corto con persistencia media.
Por todo ello, creemos justo calificar a este maceración carbónica con 80 BLL.
Barrica Llena
No hay comentarios:
Publicar un comentario