jueves, 24 de septiembre de 2015

NUESTRA SELECCIÓN 2005 Un vino de Manuel Manzaneque

Bodega familiar, cuyo autor Manuel Manzaneque, quiso volver a sus raíces y fundó su propia bodega. Con la vocación de crear un producto exclusivo de primerísima calidad, tras largos años de análisis de tierras, microclima y variedades de viñedo, emplazó la bodega en la Finca Élez. Situada en El Bonillo (Albacete) muy cerca del epicentro del terremoto que azotó la zona a primeros de año (aunque sabemos por información directa de responsables de la bodega que no sufrió daño alguno), tierra de sabinas, romeros y tomillos, con un microclima privilegiado gracias a la altitud (1.080 m de altura) y a la importante variación térmica (más de 20 grados) entre el día y la noche en el periodo de maduración, sus variedades cuidadosamente elegidas para el terreno dan lo mejor que hay en ellas. Obteniendo vinos personales y diferentes lo que les ha llevado a conseguir la primera Denominación de Origen Exclusiva de España: D.O. Finca Elez, exclusiva para sus viñedos y bodega, un acontecimiento sin precedente.

Es un vino de pago, y retamos a todos aquellos que ponen en tela de juicio la calidad y exclusividad de estos vinos a que lo pruebe y disfrute como un enano, elaborado con las variedades Cabernet Sauvignon, Merlot y Tempranillo que han permanecido 10 meses de excelente crianza en barrica que han hecho de él uno de los vinos más exclusivos y personales que hemos tenido el honor de beber en los últimos tiempos.




Es un vino que en copa parada presenta un color picota negra muy madura con corazón negro, justo los que más emociona a Barrica Llena al ver una copa de vino. Esta carta de presentación ya nos indica que nos vamos a encontrar con un vino con cuerpo y poderío, lo cual nos pone a mil...
Ribete granate como no podía ser de otra forma, estamos hablando de un vino de 2005, nada más y nada menos, donde su paso por madera y botella se deja notar ya visualmente. Es decir, es un vino franco, no oculta lo que llevo dentro.

Agitamos la copa y la acercamos a la nariz y... a flipar. Hay de todo y muy potente, como nos gusta, frutos negros y rojos muy maduros, con la oxigenación arrancan los aromas terciarios a maderas nobles tostadas y especiados. ¡Dios, qué regalo!

Y como no podía ser de otra forma en boca llega el clímax total. Un vino que llena, taninos muy muy domados y pulidos, equilibrado con una intensidad fruta madura/madera impecable. 
Final muy largo y retrogusto a ciruelas negras maduras. ¡Qué más se puede pedir!

Queda por tanto justificado, bajo nuestro humilde criterio, que esta elaboración pertenezca a ese selecto grupo de los Grandes Pagos de España, por su exclusividad, personalidad y extremada calidad.

No queda otra opción que otorgar a este vino irrepetible, por varios motivos, una calificación de 90 BLL, sobresaliente.


Barrica Llena



Nisia 2013

Probablemente sean “las ruedas” uno de los inventos más importantes de la historia. Prácticamente cualquier máquina construida desde el comienzo de la revolución industrial posee en mayor o menor medida la presencia de las ruedas, por lo que es difícil imaginar un sistema mecanizado sin la presencia de la rueda o un componente simétrico moviéndose de forma circular alrededor de un eje.

Pero lógicamente no nos hemos reunido aquí para hablar de este tipo de “Ruedas”. Efectivamente nos vamos a centrar en la archifamosa Denominación de Origen Rueda, ampliamente vapuleada y denostada hasta límites insospechados, por culpa en su mayoría por la multitud de elaboraciones de escasa calidad con unos precios realmente bajos. Es posible comprar una botella de Rueda por más o menos lo que te cuesta una bolsa de pipas.

Gracias a elaboradores como la gente de Bodegas Ordóñez www.jorgeordonez.es, siguen existiendo referencias interesantes dentro de la susodicha D.O. Recordemos que el Grupo Ordónez posee una amplia red de elaboraciones repartidas por toda la geografía, con una más que notable calidad, damos fé de ello.


En esta ocasión hemos tenido el placer de degustar este Nisia 2013, un vino blanco bajo la D.O. Rueda, elaborado en su totalidad con uva Verdejo procedente de viñas con una media de 50 años. El 90% de este vino pasa por una fermentación en depósitos de acero inoxidable a temperatura baja. Posteriormente pasa por una crianza sobre lías durante 4 meses. El 10% restante del vino fermenta en barricas de roble francés también junto a sus lías.


Se esconde bajo una etiqueta realmente bonita, inspirada en unas ruinas romanas próximas a la bodega.

Al descorchar empezamos a atisbar que nos encontramos ante un Rueda de los de verdad, de los realmente atrayentes. El color es amarillo pajizo, limpio y brillante, con una suculente lágrima que se pasea por las paredes de la copa.
En nariz es muy completo, fruta blanca de hueso madura, hierba recién cortada, toques florales y notas cítricas que hacen que su conjunto sea un regalo para nuestro sentido nasal.

Es en boca dónde finalmente nos enamora, un vino muy completo y lleno de matices, mucha fruta fresca, la hierba de nariz aquí se acrecenta, sútiles notas minerales con una acidez que podríamos considerar que se presenta perfecta. Largo, sabroso y profundo... nos ha encantado.

Desde aquí rompemos una lanza a favor de las elaboraciones de calidad de la D.O. Rueda e invitamos al lector a no dejarse llevar por la cantidad de referencias tiradas de precio que se pueden encontrar en cualquier lineal de supermercado y por un poco más, apostar por referencias que realmente merezcan la pena. Con todo y con eso, hemos decidido que merecidamente su puntación es 88BLL.

 

Barrica Llena

miércoles, 23 de septiembre de 2015

VAL DE SOUTO Orixes 2013

La Denominación de Origen Ribeiro está situada en la Galicia meridional, en el borde noroccidental de la provincia de Ourense, en las confluencias de los valles formados por los ríos Miño, Avia y Arnoia.
Durante mucho tiempo se la ha considerado como el hermano menor, de menor calidad y coste, de la D. O. Rías Baixas, pero nada más lejos de la realidad, los vinos de Ribeiro tienen personalidad propia y una calidad cada vez mayor, que ya quisieran en muchos casos algunas bodegas de las Rías Baixas.


Val de Souto Orixes 2013, es un vino blanco elaborado con las variedades de treixadura, godello y loureiro (las tres muy gallegas y autóctonas) por bodegas Val de Souto que tiene una capacidad de 24.000 litros y 2 hectáreas de viñedos, y se encuentra en el pueblo de Souto, perteneciente al municipio de Castrelo de Miño en la provincia de Ourense, al sur de Galicia. Esta bodega además elabora otro blanco, Val de Souto blanco y un tinto, Val de Souto tinto.

Presenta un color muy atractivo amarillo intenso con tonos verdosos y un precioso ribete color aceite de girasol. Se observa buena lágrima densa y gruesa.

En nariz, es muy agradable, ya que presenta aromas de intensidad media minerales, frutas blancas (peras, manzanas) y flores.

En boca, lo primero que llama la atención es que tiene cuerpo, te llena la boca (lo cual se agradece mucho en un vino blanco joven). Con una acidez ligera y controladase nos antoja un vino superfresco, algo meloso con toques que recuerdan a ciruelas y peras lo que le hace aun más apetecible. Es largo y duradero.




En resumidas cuentas, es un vino que hay que apuntárselo y que por supuesto marida perfectamente con otros productos de la tierra como se aprecia en la foto.
Un vino muy agradable, correcto y todo un descubrimiento, se merece 80 BLL.



Barrica Llena

domingo, 6 de septiembre de 2015

ABADÍA DE SAN QUIRCE 2013 6 meses barrica

Últimamente hemos tenido mucho cuidado a la hora de seleccionar los vinos de la D. O. Ribera del Duero que bebíamos, porque ya sabéis el refrán... Cría fama y échate a dormir. Pues eso es lo que está pasando a muchas bodegas de esa zona, que con solo poner la contraetiqueta lo tienen todo hecho y es un craso error ya que el consumidor no es tonto y cada día sabe y exige más a los vinos por los que desembolsa, en muchos casos, una notable cantidad de euros. Pero en este caso, y debido a nuestro minucioso estudio de las bodegas de la zona, el vino que os traemos he sido todo un acierto.




Si algún día circuláis por la A-1 a la altura del Km. 170 (Gumiel de Izán -Burgos-) podéis contemplar en el margen de la carretera esta preciosa bodega y, por su puesto, parar a degustar sus excepcionales elaboraciones.
Este estupendo brebaje está elaborado por Bodegas Imperiales. En el año 1998 un grupo de empresarios y viticultures, todos ellos vinculados a la Ribera del Duero, afrontan a fundación de Bodegas Imperiales.
Desde su fundación Bodegas Imperiales ha realizado una decidida apuesta por la calidad. Vinos de alta calidad que reflejen las características de nuestro suelo y de las variedades autóctonas de nuestra tierra por lo cual ha recibido innmerables premios.
Abadía de San Quirce, elabora este vino que os presentamos y dos más que tenemos en la recámara para próximas ocasiones, un crianza (de 14 meses de barrica) y un reserva (con 18 meses de barrica). Además de su preciado Finca Helena y un verdejo.

Es un vino elaborado en su totalidad con la tan exquisita variedad de Tempranillo que en España sabemos tratar tan bien, criada durante 6 meses en barrica de roble y el resto de su maduración, hasta su puesta en el mercado, en botella.

A la vista se presenta como un color tojo picota, de capa media-alta y ribete con recuerdos violáceos. Lágrima muy densa y glicérica. Estos calificativos a barrica llena le pone a funcionar las glándulas salivares, están muy en nuestra línea.

En nariz, al agitar la copa fluyen aromas de frutas negras, especias, toque mineral, ligeros tostados y algo de cacao. ¡Casi nada, toda una delicia!

Pero donde un vino debe expresar todo su poderío y calidad es, obviamente, en boca. Pues bien Abadía de San Quirce 6 meses... No falla. 
Entrada noble, agradable, abocado con la acidez justa, vuelve a aparecer la fruta negra (moritas y arándanos) todo ello culminado con un final algo astringente pero sin molestar (algo normal en un vino de 6 meses de roble) que con la aireación se va mitigando y empiezan a venir recuerdos minerales. Fianl largo, muy muy largo.


¡Todo un espectáculo de vino! Por todo ello creemos que es bien merecedor de 85 BLL. Ojalá todo en el Ribera del Duero se hiciera así.


Barrica Llena